Las Hadas son seres luminosos que aparecen frecuentemente en los bosques más profundos, las aguas de los arroyos y los centenarios árboles. Han estado presentes en nuestra cultura desde tiempos inmemorables.      Se representan como un ser pequeño y sobrenatural que posee poderes mágicos e intercede para bien o para mal en nuestros asuntos. Se desconoce el origen exacto de la creencia en estos seres pero ya en la Edad Media se pueden encontrar relatos en los que se habla sobre ellas. Desde tiempos ancestrales, en todas las tradiciones de todos los pueblos del mundo entero se ha creído en la existencia de estos seres.      Las Hadas o Fares corresponden a la misma corriente de vida que los Elementales (duendes, gnomos, elfos,...)sólo que con mayor evolución, ya que pertenecen al plano mental.      La materia de qué están hechas las Hadas es sutil y etérea, traslúcida,  bajo esta apariencia que se las puede ver cuando se dignan mostrarse a los humanos, normalmente se encuentran situadas en el plano astral, pudiendo vernos ellas y nosotros no.        Para entrar en contacto con ellas no basta sólo con desearlo, ellas también han de estar dispuestas, y que accedan es muy difícil porque aunque puedan estar entre nosotros de forma invisible, no siempre quieren manifestarse  a nuestros ojos, si vuestro corazón no abriga maldad ni interés y albergáis deseos limpios, he aquí dos recetas mágicas:        Hay tentaciones que han atraído hasta la más desconfiada de las hadas. Les encanta el jengibre y la cebada, si pones un pequeño cesto con esto alimentos en el jardín, seguro que vendrán. Con bastante frecuencia habrá que reemplazarlo si queremos que permanezcan en nuestro jardín largo tiempo. Les gustan ver en el jardín, tomillo y trébol, este último "MUY IMPORTANTE" que solo sea de 3 hojas. Les encanta la leche.